La soldadura de placas de acero inoxidable es un proceso especializado que requiere precisión y cumplimiento de métodos específicos para garantizar la integridad y resistencia de la unión. A continuación se ofrece una descripción detallada de los diversos métodos y técnicas de soldadura utilizados para placas de acero inoxidable:
Tipos de juntas a tope
Las juntas a tope son el tipo de junta más utilizado en la soldadura. Vienen en varias formas, que incluyen:
Juntas a tope en forma de I, sin biselar y adecuadas para placas de hasta 6 mm de espesor. Estas uniones se sueldan por ambos lados dejando un espacio entre las placas.
Uniones en bisel en forma de V, que son fáciles de preparar pero que pueden provocar deformaciones posteriores a la soldadura.
Juntas biseladas en forma de U, que requieren menos metal de aportación y provocan menos deformación pero son más difíciles de mecanizar.
Uniones con ranura en X, que tienen una sección transversal de soldadura simétrica y causan menos deformación y tensión en comparación con las ranuras en forma de V. También requieren menos metal de aportación que las ranuras en forma de V cuando el espesor de la placa es el mismo.
Juntas de ranura doble en forma de U, que son similares a los biseles en forma de U pero se utilizan para estructuras más críticas debido a su complejidad.
Técnicas de soldadura por arco
La soldadura por arco de placas de acero inoxidable implica técnicas específicas para iniciar y mantener el arco de forma eficaz:
Iniciación del arco: Existen dos métodos principales para iniciar el arco:
Método de rayado: consiste en alinear el electrodo con la pieza de trabajo, rayar ligeramente la superficie a unos 20 mm del arco y luego levantar el electrodo para mantener una altura del arco de 2 a 4 mm. Es más fácil de realizar pero puede dañar la superficie de la soldadura y normalmente se usa con electrodos alcalinos.
Método de golpe directo: este método implica alinear la varilla de soldadura con la pieza de trabajo, golpear el electrodo verticalmente sobre la pieza de trabajo para iniciar el arco y luego levantarlo a una altura de 2 a 4 mm. Es más preciso pero requiere habilidad y suele usarse con electrodos ácidos o en espacios reducidos.
Solución de problemas: Si el electrodo se pega a la pieza de trabajo, se puede liberar moviéndolo suavemente de un lado a otro. Si esto no funciona, el soldador debe soltar inmediatamente el electrodo y dejar que se enfríe antes de retirarlo. Si el electrodo tiene una funda al final, se debe retirar con las manos enguantadas antes de reiniciar el arco.